Si algo tengo en común con Bruce Willis es mi devoción por Bullitt. El actor también se ha confesado devoto del teniente Frank Bullitt, pero el puede homenajearlo formas bastante más exclusivas que yo. Por ejemplo, recreando el mítico 1968 Ford Mustang Fastback GT390 con un desvencijado Shelby Mustang GT500.
En 2001 comenzó el proyecto a partir de un 1968 Shelby GT500 Convertible pintado en Acapulco Blue. Tras el proceso de restauración, se pintó con el pertinente Dark Highland Green y se tapizó el interior con todo lujo de detalles, dando como resultado un trabajo realmente excelente. Un dato, sólo el interior costó 28.000 dólares. Casi nada.
El motor también se sustituyó por un Ford V8 428, que con los convenientes arreglos y ajustes llega a los 570 CV de potencia máxima. Una verdadera obra de arte sobre ruedas y perfecta para homenajear a una gran película. Hoy mismo se subastará en el Petersen Automotive Museum y se espera que se pague por él unos 150.000 dólares. Barato, siendo de quien y con el buen trabajo que lleva encima.
Vía | MustangBlog.com
En MotorPasion | 1968 Shelby Mustang GT500KR original y a la venta en eBay