El nuevo BMW Z4 mantiene el espíritu del modelo anterior, aunque con una serie de cambios que lo hacen un coche mucho más interesante.
El más destacable es su techo duro retráctil, una solución que adpota el Mercedes SLK (uno de sus principales rivales) y que combina el placer de la conducción con la comodidad. Por este motivo, el BMW Z4 sustituye a dos modelos: Z4 Roadster y Z4 Coupé.
El otro punto destacable del BMW Z4 es su capó alargado que, unido a una posición retrasada y baja del conductor, hace que el disfrute de la conducción sea todavía mayor.
Diseño exterior
Siempre conservando en su frontal la parrilla clásica de BMW, el nuevo BMW Z4 se caracteriza por tener unas formas más esculturales y dinámicas, no sólo en comparación con su predecesor sino también con los últimos modelos de la marca.
El frontal más abombado, las ópticas traseras con dibujos redondeados y sobre todo las líneas en relieve que atraviesan su carrocería longitudinalmente lo hacen menos sobrio y más dinámico.
La línea que parte del interior de los faros se prolonga hasta la trasera, a lo largo de un capó muy alargado, al estilo de los roadster clásicos. Otro detalle curioso de su diseño es el pilar A en color negro, independientemente del color de la carrocería.
BMW Z4 con techo duro eléctrico
Al contrario que el Z3 y el Z4 anterior, en este caso se ha optado por un techo duro eléctrico con dos piezas de aluminio, que primero se pliegan una sobre la otra y después se ocultan bajo el maletero.
El proceso de abrir y cerrar lleva 20 segundos, y permite una capacidad de 310 litros con él desplegado o 180 con él plegado. Además del maletero, existen varios huecos portaobjetos, y un hueco detrás de los asientos. También es posible llevar esquíes o bolsas de golf.
Interior
El interior del BMW Z4 es continuista con los diseños de la marca, sobrio y horizontal. Lo que más destaca son los controles circulares situados en la mitad de la consola: cuatro mandos para el climatizador y el botón de arranque.
En la parte superior de la consola se oculta el navegador, con pantalla abatible de 8,8 pulgadas. El nuevo Z4 incorpora el control iDrive, el mando circular situado entre los dos asientos. Con el navegador Professional también existe la posibilidad de acceso a internet en el coche.
La tapicería de piel (opcional) lleva unos pigmentos especiales que BMW denomina Sun Reflective, y que repelen la luz del sol para que el volante y los asientos no se calienten tanto si la capota está bajada.
Motores y dinámica
Inicialmente el BMW Z4 estará disponible con una gama de tres motores, todos de seis cilindros en línea.
BMW Z4 sDrive35i: 3.0 turbo de 306 cv. 0 a 100 en 5,2 segundos (una décima menos con la caja automática de doble embrague). Consumo de 9,4 litros a los 100.
BMW Z4 sDrive30i: 2.75 de 258 cv, 0 a 100 en 5,8 segundos (3 décimas más con cambio automático), consumo de 8,5 litros a los 100.
BMW Z4 sDrive23i: 2.5 de 204 cv, 0 a 100 en 6,6 segundos (7 décimas más con cambio autómatico), consumo de 8,5 litros a los 100.
De serie lleva una caja de cambios manual de seis velocidades, con recorridos de la palanca especialmente cortos para mejorar la experiencia de conducción.
Existe un cambio automático de seis velocidades (Steptronic), con el que las prestaciones empeoran (bastante como se ve en las cifras de acelerción), y un nuevo cambio automático de siete velocidades y doble embrague, que sí mejora las prestaciones. Este sólo está disponible como opción para el Z4 sDrive35i.
El chasis deportivo M tiene tres modos de funcionamiento, Normal, Sport y Sport+, que modifica parámetros como la respuesta de la dirección, respuesta del acelerador y dureza de la suspensión.
Fuente | BMW
En MotorPasion | BMW Z4, primeras imágenes oficiales