Y ya está aquí el Mercedes-Benz Clase S. Por fin se ha desvelado el buque insignia de la casa de la estrella en el Salón del Automóvil de Shanghai, un lavado de cara a su berlina de representación que se adapta a los nuevos tiempos izando la bandera de la la eficiencia con una interesante propuesta de motores.
Por fuera no hay demasiados cambios, ya que han querido centrar más los recursos en la renovación a nivel interno. Por un lado los ingenieros alemanes han trabajado muy duro para convertir a esta cuasi-limusina en un coche lo más eficiente posible con unos consumos homologados que bajan hasta los 5,5 litros a los 100 km (NEDC). De otra parte hace su aparición en el Clase S el sistema Intelligent Drive en un nuevo paso que nos aproxima a la conducción autónoma.
Mercedes-Benz Clase S, un viejo-nuevo conocido
Exteriormente podremos reconocer a esta nueva generación del Clase S porque su larga y (en la medida de lo posible) esbelta carrocería se pone un poco de maquillaje para lucir más moderna. En la parte frontal la parrilla es nueva junto con un parachoques delantero de rasgos más duros, prominentes entradas de aire y ópticas nuevas.
En la parte trasera también hay algunos cambios con grupos ópticos formados por nuevos pilotos LED y un paragolpes algo distinto, con un lenguaje más fluido que abraza unas nuevas salidas de escape para todas las versiones. En los laterales el único cambio lo encontramos en una nueva gama de llantas que van desde las 17 a las 20 pulgadas.
Si pasamos al interior nos encontraremos con un habitáculo remozado en el que se ha buscado el confort en su grado máximo. Los materiales de la más alta calidad y las líneas fluidas se combinan para ofrecer un entorno totalmente premium, aderezado por una nueva iluminación ambiental con 64 tonalidades.
El volante de nueva factura incorpora controles sensibles al tacto y la capacidad de controlar casi cualquier función sin apartar las manos del volante. Para rozar lo sublime a los mandos del Clase S, Mercedes-Benz incluye también el Energizing Comfort Control, un sistema que detecta el estado anímico del conductor y regula la climatización y el masaje de los asientos.
Además el Mercedes-Benz Clase S de 2017 se convierte por derecho propio en el Clase S más tecnológico hasta la fecha introduciendo en su habitáculo en un mundo puramente digital. Igual que ocurre en las versiones más equipadas del Clase E, los botones físicos quedan relegados al mínimo en favor de dos grandes pantallas digitales de alta resolución.
Esta nueva puerta al mundo de la conducción como una experiencia tecnológica se refuerza con, entre otros dispositivos, el Intelligent Drive que ya conocimos en el Clase E. Así, esta gran berlina será capaz de aparcar de forma autónoma, asumir las funciones de conducción temporalmente, mantener la distancia de seguridad en todo momento pudiendo llegar a detenerse, frenada automática, detección de señales de tráfico, frenada de emergencia...
Motorizaciones para el Mercedes-Benz Clase S 2017
S 350 d 4MATIC | S 400 d 4MATIC | S 560 4MATIC | AMG S 63 4MATIC+ | |
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Configuración | Seis cilindros en línea | Seis cilindros en línea | Ocho cilindros en uve | Ocho cilindros en uve |
Cilindrada | 2.925 | 2.925 | 3.982 | 3.982 |
Potencia (kW/CV) | 210/290 | 250/345 | 345/475 | 450/620 |
Par motor (Nm) | 600 | 700 | 700 | 900 |
Consumo (l/100 km) | 5,5 | 5,6 | 8,5 | 8,9 |
Emisiones CO2 g/km* | 145 | 147 | 195 | 203 |
A partir de ahora el Mercedes-Benz Clase S contará con cuatro nuevas motorizaciones, además de las ya existentes. Empezando desde el escalón inferior se estrena un nuevo propulsor diésel de seis cilindros en línea y 2.925 centímetros cúbicos que estará disponible en dos potencias: 290 CV para el S 350 d y 345 CV para el S 400 d.
Por encima se encuentra un nuevo bloque de ocho cilindros en uve con 3.982 centímetros cúbicos que también ofrece dos niveles de potencia. Por una parte el S 560 saca unos buenos 475 CV y 700 Nm de par motor (la misma cifra de par que el S 400 d) mientras que como tope de gama se erige el AMG S 63 con unos salvajes 620 CV y 900 Nm de par motor.
Mercedes-Benz ha trabajado en cumplir unos buenos niveles de eficiencia, reduciendo el consumo para el gasolina en un 10% con entre otras medidas a la desconexión simultanea hasta cuatro cilindros. Hay que señalar también la mejora del Clase S Plug-in Hybrid con una nueva batería de 13,3 kWh con hasta 50 km de autonomía eléctrica y un seis cilindros en línea electrificado a 48 voltios con sobrealimentación eléctrica.
La actualización afecta a toda la gama, desde el más básico Clase S hasta el Maybach, pasando por los más prestacionales modelos AMG. La llegada del nuevo Mercedes-Benz Clase S a los concesionarios europeos será dentro de bastante poco, durante el próximo mes de julio.