A Tesla se le ha quedado pequeño California. El fundador de la compañía, Elon Musk, ha anunciado durante una reunión de accionistas que trasladará su sede de Palo Alto, California, a Austin, Texas.
"Es difícil para la gente pagar una casa, y la gente tiene que venir desde muy lejos... Hay un límite en cuanto a lo que se puede crecer en el Área de la Bahía", ha dicho el multimillonario en declaraciones recogidas por la CNBC.
El meollo de la cuestión: ahorrar impuestos
A pesar de la decisión´´ de trasladar la sede a Austin, la compañía planea aumentar la producción en su planta de California: "Nuestra intención es aumentar la producción de Fremont y Giga Nevada en un 50 %", ha dicho Musk.
Mientras tanto, Tesla ha adquirido una vasta cantidad de terreno junto a su Gigafactoría de Austin reservada para el llamado 'Bobcat Project', un misterioso proyecto que estará centrado en la producción de coches eléctricos.
De Austin, que aún no está operativa, saldrán dos de los productos más esperados -y pospuestos- de la compañía: la Tesla Cybertruck y el camión Semi, además del Model 3 y el Model Y.
El tema está en que California es uno de los estados en donde se paga más impuestos de todo el país, y además aplica algunos de los impuestos sobre la renta personal más altos a sus residentes ricos (por eso Musk se mudó a Austin y por eso la sede de Stellantis está en Holanda).
California tiene leyes laborales más estrictas y costos de vida e impuestos más altos que otros estados, mientras que Texas es conocido por tener mano de obra más barata y una regulación menos estricta. Esto ha provocado una 'fuga' de tecnológicas en los últimos años.
A eso se le añade que la llamada 'sartén de América' ofrece exenciones de impuestos para instalar nuevas fábricas y plantas en el estado para atraer a las tecnológicas.
De hecho, según datos de Reuters, a Tesla se le devolvieron nada menos que 65 millones de dólares en concepto de devolución de impuestos para su Gigafactoría en Austin.
No debería extrañarnos que sea la ciudad elegida de Rivian para instalar su segunda fábrica.
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